¿Cómo se utiliza la biometría en el sector de los pagos?

La digitalización y los avances tecnológicos han propiciado la creación de nuevas formas de pago. Los pagos biométricos generan un cambio en la forma en la que las personas pagan tanto en comercios físicos, como online.

La identificación biométrica hace referencia a la aplicación de técnicas matemáticas teniendo en cuenta los rasgos físicos y de conducta de una persona con el objetivo de verificar su identidad. Pero ¿qué es la biometría y cómo se utiliza en el sector de los pagos?

Biometría y seguridad

La dificultad para replicar alguna parte del cuerpo convierte a la biometría en un sistema de identificación muy potente para el sector de los pagos. Las huellas dactilares, la retina, la voz o incluso, las venas de la mano son algunos de los patrones que ya se utilizan para identificar individuos.
Al no existir dos huellas dactilares o voces exactamente iguales, determinadas partes del cuerpo pueden utilizarse como elementos de identificación personal, lo que puede resultar muy beneficioso para incrementar la seguridad y prevenir el fraude y la suplantación de identidad.
Alguno de los problemas más comunes que surgen en el momento de autenticar el pago es cuando el usuario tiene que recordar contraseñas o datos de acceso de múltiples cuentas. Mediante la biometría se eliminan todos estos obstáculos, pues a diferencia de otros sistemas de seguridad, los datos biométricos no se pueden robar o perder porque forman parte del individuo y nadie los puede memorizar como ocurre con las claves y las contraseñas.

Biometría como forma de autenticación

Como consecuencia de la crisis sanitaria, la gran mayoría de los consumidores prefiere utilizar soluciones de pago sin contacto haciendo uso de la tecnología NFC, a través de tarjetas contactless, teléfonos móviles y otros dispositivos (wearables) que permiten al cliente efectuar un pago con solo acercar su tarjeta o dispositivo al terminal para abonar su compra. Así, el incremento del uso del pago móvil ha hecho que cada vez los usuarios utilicen de forma más habitual la biometría para autenticar sus compras, beneficiándose así de la seguridad, la rapidez y la comodidad que ofrece esta forma de checkout.
Para ofrecer la mejor experiencia de compra, los comercios deben apostar por la implantación de los nuevos dispositivos de cobro como son los “Smart Terminals”, que permiten autenticar el pago con la huella dactilar del usuario. Otra opción es que el usuario tenga un dispositivo móvil con sus datos biométricos escaneados en el mismo y termine el pago desde su propio dispositivo. Toda esta transición implica un coste tecnológico que los comercios deberían ser capaces de asumir para responder a las necesidades del consumidor, que cada vez es más digital y demandante de una experiencia de compra fluida y sin fricción.
En definitiva, podemos afirmar que la autenticación a través de sistemas biométricos no solo aporta una mayor comodidad para el usuario, sino que, además, puede traducirse en un incremento de ventas para el comercio gracias a la mejora de experiencia de cliente.

Últimas innovaciones en el sector de los pagos biométricos

El sector de los pagos biométricos se encuentra en constante innovación y se prevé que siga experimentando una creciente evolución en los próximos años. Entre las recientes novedades destacan las tarjetas con huella dactilar. Este tipo de tarjetas incluyen un sensor de huella dactilar y el usuario solo tiene que colocar el dedo en el lector de huella digital y acercarla al terminal para realizar la operación. Esta forma de pago permite efectuar transacciones en cuestión de segundos evitando la introducción del número PIN.
Desde Sipay, pasarela de pagos con más de 25 años de experiencia en el sector, destacan la necesidad de que los comercios faciliten la integración de los sistemas biométricos como método de identificación de pago y poder ofrecer a los clientes una experiencia de compra sin fricción.

Otros artículos